A.M. Charris

1962

A.M. Charris

Ángel Mateo Charris, 1962, Cartagena (España).

Ingresa en la Facultad de Bellas Artes de San Carlos de Valencia en 1980. Próximo al cómic -Hergé aparece entre sus influencias más inmediatas-, incorpora inicialmente las maneras plásticas del Pop, aunque desde muy pronto adopta un talante abierto y receptivo ante la diversidad de fuentes y opciones estilísticas que le ofrece la historia del arte. Al finalizar la carrera, complementa su formación con estudios de diseño gráfico, cuyos métodos compositivos influirán de manera determinante en su obra.

En 1988, con ocasión de su primera estancia neoyorquina, y en compañía del también pintor Gonzalo Sicre, se adentra en la pintura americana, especialmente en la obra de Edward Hopper y la tradición decimonónica de los representantes de la Hudson River School.

A comienzos de la década de los 90 se decanta definitivamente por una práctica pictórica plenamente figurativa, en la que el empleo de citas visuales que remiten al cine, la historia del arte o la publicidad, con una sutil retórica conceptual.

Tras las huellas de Hopper, libro editado en 1997 junto a Gonzalo Sicre, resultado de su tercera estancia en Estados Unidos- y un calculado exotismo -desiertos, paisajes helados-, constituyendo escenarios críticos en los que homenajea o cuestiona los derroteros del arte del siglo XX.

La compleja iconografía de sus homenajes y citas incluye a los artistas que han sido particularmente importantes en su formación como Klee, Miró, Hopper, Friedrich, De Chirico, Torres-García, Van Gogh, Sorolla, Beuys, Dalí, Renau, incorporando a cada lienzo fragmentos del artista al que le dedica el homenaje que se yuxtaponen a imágenes tomadas de los medios de comunicación.

En el 2001 es comisionado por el festival La Mar de Músicas para realizar una exposición sobre un viaje a Mali, que da como resultado la exposición y el libro Tubabus en Tongorongo. De este y otros viajes (Birmania, Japón, Kenya, México, Europía) extrae la otra fuente principal con la que construye su poética, que ha sido descrita por la crítica de arte como un “universo inquietante que mezcla el estilo de Miró, Dalí, Chagal o De Chirico”.Sus exposiciones individuales tienen lugar en diferentes ciudades españolas –Murcia, Añlicante,Madrid, Barcelona, Valencia, Cádiz, Orense, San Sebastan, Zaragoza, Pamplona o Santander-, si bien participa en colectivas a nivel internacional.